miércoles, 28 de noviembre de 2012
lunes, 22 de octubre de 2012
Los Valores Humanos
Los valores humanos en nuestras vidas son fundamentales, ya que nos permite alcanzar determinadas cosas y por sobre todo adquirir otras actitudes tan relevantes para actuar como sujetos más comprometidos. Por ejemplo: responsabilidad, respeto, compromiso, amor, justicia, sencillez, optimismo, entre otros.
En la actualidad, estamos inmersos en una sociedad que ha perdido muchas de estas actitudes y que hacen al valor humano como el eje central de una sociedad más equitativa. Es decir, nos estamos rigiendo por la pérdida de metas, objetivos claros, para tornarnos más consumistas y materialistas; lo cual crea en nosotros una falsa felicidad y nos enceguece ante los verdaderos y simples hechos que nos permiten ser más humano, en esta sociedad global.
Lo más importante, es valorarse uno mismo y tal cual es. Porque ello nos permitirá aceptar y querer a las demás personas por lo que son y no por lo que tienen. Debemos ser más generosos y más capaces de prestar ayuda al prójimo ante determinadas circunstancias, sin esperar algo a cambio, sino por el solo hecho de sacar de uno mismo valores tan importantes para nuestro ser. No seamos superficiales, sino seamos nosotros mismos, porque ello nos ayudará a rescatar el valor humano.
Es decir, a la capacidad que tiene cada persona de actuar libremente junto a la toma de decisiones, sin que estos perjudiquen a los demás. Primemos en cada uno de nosotros este valor, porque debemos velar y obrar por el bien de todos.
APLIQUEMOS LOS VALOREEESS..!!
LA EMPATIA
Empatía
La empatía supone un esfuerzo, aquel que realizamos para reconocer y comprender los sentimientos y actitudes de las personas, así como las circunstancias que los afectan en un momento determinado. Sin embargo, la empatía no es el producto del buen humor con que despertamos, ni del afecto que nos une a las personas. Si esta combinación fuera común, siempre estaríamos disponibles para escuchar a los demás y dejaríamos momentáneamente nuestras ocupaciones, pensamientos y preocupaciones para atender a quienes nos rodean.
LA VOLUNTAD
En relación a esta cuestión, podemos decir que nuestra voluntad opera principalmente en dos sentidos:
- De manera espontánea cuando nos sentimos motivados y convencidos a realizar algo, como salir a pasear con alguien, empezar con un pasatiempo, organizar una reunión, asistir al entrenamiento...
- De forma consciente, cada vez que debemos esforzarnos a realizar las cosas: terminar el informe a pesar del cansancio, estudiar la materia que no nos gusta o dificulta, recoger las cosas que están fuera de su lugar. Todo esto representa la forma más pura del ejercicio de la voluntad, porque llegamos a la decisión de actuar contando con los inconvenientes.
LA GRATITUD
La gratitud implica algo más que pronunciar unas palabras de manera automática, sino que responde a aquella actitud que nace del corazón, en aprecio a lo que alguien más ha hecho por nosotros.
Ahora bien, la gratitud no "devolver el favor": si alguien me sirve una taza de café no significa que después debo servir a la misma persona una taza y quedar iguales... El agradecimiento no es pagar una deuda, es reconocer la generosidad ajena.
RESPETO
Cancion acerca del Respeto.
La
vida sociedad nos hace reflexionar sobre el valor del respeto, esto trae
aparejado la necesidad de establecer algún tipo de certezas en torno a las ideas
y la tolerancia. Es decir: ¿Qué hay que saber sobre el Respeto, la Pluralidad y
la Tolerancia?
Respeto, Pluralismo y Tolerancia :
Cuando hablamos de respeto hablamos de los demás. De esta manera, el respeto
implica marcar los límites de las posibilidades de hacer o no hacer de cada uno
y donde comienzan las posibilidades de acción los demás. Es la base de la
convivencia en sociedad.
GENEROSIDAD
Pedrito, el caracol y la babosa
Pedrito, triste, se ocultó en su caparazón. Tras unos cuantos días
descansando, llovió, y Pedrito salió dispuesto a irse a vivir a otro
lugar, pero al sacar la cabeza vio a una pequeña babosa que se había
asustado al verlo.
- No te asustes, sólo soy un caracol.
- Pero, pero eres muy extraño, ¡llevas una piedra encima de tu cuerpo! –dijo temblando la babosa.
- No, no es una piedra, se llama caparazón, es mi casa. Cuando tengo frío o llueve mucho me escondo dentro y me siento mejor.
- Pues me gustaría tener un caparazón como tú. ¿Cuándo me crecerá?
- Tú eres una babosa y vosotras no tenéis caparazón, pero si quieres podemos intentar encontrar uno vacío.
- Me gustaría mucho, dijo la babosa pequeña dando saltos de alegría.
Los dos amigos se pusieron a buscar por todo el bosque y finalmente
debajo de la hojarasca encontraron un caparazón precioso, con una
espiral dibujada, pero le iba tan grande, que decidieron buscar otra.
Al cabo de un buen rato encontraron un pequeño caparazón, pero era
tan menudo que la babosa no cabía de ninguna de las maneras. Se puso
tristísima y el pobre Pedrito no sabía qué hacer para que parase de llorar.
Finalmente se le ocurrió una brillante idea:
- Podríamos compartir mi caparazón, dijo Pedrito para consolar la babosa.
- ¿De verdad harías esto por mí?
- Pues claro que sí. Eres mi amiga. Se hizo de noche y los dos compañeros se pusieron a dormir, el caracol se acurrucó al fondo del caparazón y la babosa cupo perfectamente.
- ¡Buenas noches! dijeron los dos a la vez.
FIN
Cuento de Natalia Pons Roussel (España)
AMISTAD Dibujo Para Colorear
A
medida que vamos creciendo y desarrollándonos, encontramos de imprevisto
amistades, muchas veces comienzan sin buscarlas: alguien “nos cae bien” y
comenzamos a relacionarnos con esa persona. Convicciones, sentimientos, gustos,
aficiones, opiniones, ideas políticas, creencias, religión son algunos de las
cosas en común, que pueden hacer que nos hagamos amigos de alguien.
Es
importante sentirnos a gusto con una persona, conversar y compartir
sentimientos, es el principio de lo que llamamos amistad.
Cuento para niños Un grilllito aventurero
SERVICIO
Servir implica ayudar a alguien de una forma espontánea, es decir adoptar una
actitud permanente de colaboración hacia los demás. Una persona servicial supone
que traslada esta actitud a todos los ámbitos de su vida: en su trabajo, con su
familia, ayudando a otras personas en la calle, cosas que aparecen como
insignificantes, pero que van haciendo la vida más ligera y reconfortante. Es
posible que recordemos la experiencia de algún desconocido que apareció justo
cuando necesitábamos ayuda, que luego después de ayudarnos, se perdió y no
supimos nada más.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)